El cambio climático está ejerciendo una presión creciente sobre las infraestructuras portuarias de Canarias, obligando a una revisión profunda de su diseño y funcionamiento. Factores como la modificación del oleaje, el incremento del nivel del mar y la acidificación oceánica están generando impactos significativos en la operatividad de los puertos del archipiélago.
Conscientes de esta realidad, las autoridades portuarias canarias han organizado recientemente una jornada científica para analizar los efectos actuales y futuros del cambio climático en los entornos marítimos. Durante este encuentro, expertos destacaron la necesidad de recopilar datos precisos que permitan anticipar y mitigar los escenarios más adversos.
Uno de los temas centrales fue la alteración del oleaje. Ernesto Barrera Rodríguez, jefe del servicio de modelación de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), explicó que las predicciones del oleaje deben considerar fenómenos meteorológicos globales, ya que las borrascas formadas en distintas partes del Atlántico influyen directamente en las condiciones marítimas de Canarias. Se prevé que, en los peores escenarios climáticos, el patrón de oleaje cambie y que las olas extremas se vuelvan más frecuentes, aunque su tamaño podría disminuir en ciertas regiones.
Además, se abordó la acidificación de los océanos como consecuencia del aumento de dióxido de carbono (CO₂), lo que está alterando la cadena alimentaria marina y afectando negativamente a la pesca en aguas canarias. El catedrático Santiago Hernández León señaló que la temperatura del océano ha aumentado 1,5 grados en el último siglo, un ritmo acelerado en comparación con los cambios históricos.
También se discutió el aumento del nivel del mar, evidenciado en el puerto de Las Palmas, donde ciertas infraestructuras ya experimentan inundaciones durante las pleamares. Para contrarrestar estos efectos, se propusieron medidas como la implementación de proyectos que reduzcan las emisiones de CO₂, incluyendo el uso de macroalgas y la alcalinización del agua.
José Joaquín Brito, director de la Plataforma Oceánica de Canarias (PLOCAN), enfatizó la importancia de incrementar la observación y convertir a Canarias en un banco de pruebas europeo para tecnologías oceánicas. Ambos expertos coincidieron en que la inacción frente al cambio climático podría tener consecuencias devastadoras para la economía y la vida en las islas, destacando la urgencia de adoptar medidas de mitigación efectivas.