Fuente: informacionlogistica.com
Cada día que pasa uno termina siempre aprendiendo una cosa nueva, sobre todo si esta se relaciona con el transporte, la logística y esa cosa tan de moda como es el comercio electrónico o ecommerce como algunos le llaman.
¿Toda la culpa es del transporte?
El transporte es una de las principales bases sobre las que se construye el comercio electrónico, todo lo que se compra en el mundo online tiene que ser transportado, TODO TIENE QUE TRANSPORTADO en el mundo offline.
El transporte y una correcta gestión logística se esta revelando como el verdadero talón de Aquíles del ecommerce, no solo por lo complejo del proceso de una entrega B2C ( entrega en domicilio particular), sino porque además el sector del transporte desde el inicio de la crisis en el año 2008 ha visto reducido sus ingresos por envío por encima del 30%.
Esta situación me hace seguir pensando que el foco sobre el sector del transporte dentro del proceso del ecommerce continuará.
Hay además otros dos aspectos que creo deben de ser muy tenidos en cuenta y que significan un pesada carga para el sector transporte en su relación con el ecommerce:
1-La estacionalidad
Como hemos podido ver hace pocas semanas el ecommerce también es estacional, sus picos de trabajo durante periodos concretos como el Black Friday o las navidades hacen que la capacidad para afrontar esos picos cumpliendo con los tiempos de entrega sean difíciles de mantener.
Lo hemos comprobado y las redes sociales son altavoces de no pocas reclamaciones y quejas a casi todas las compañías de transporte. En un sector donde el sistema de franquicia supone el 90% y a la que se suma una bajada generalizada de ingresos, y con el coste que supone la entrega de envíos B2C, hace que no exista mucho colchón para poder disponer de los medios y recursos necesarios para afrontar con total garantía esos picos de trabajo estacionales.
2-El precio
El segundo punto es el precio, esa espada que permanentemente está sobre el cuello, al cliente se le mantiene informado paso a paso de la evolución de su envío con múltiples formas de contacto, alertas, emails, sms etc; pero no esta dispuesto a pagar mas por un envío más rápido, y eso tiene su lógica. Si comunicamos el estado de su pedido minuto a minuto, y le hacemos todo eso con una entrega en menos de 24 horas, yo de verdad no pagaría más por un servicio tan bueno, el problema está en que el servicio que se ofrece dista mucho de su “valor económico real”, y esta me parece que será una batalla dura por cambiar.
¿Y con todo esto, hay soluciones?
Tal y como esta la situación, la búsqueda de una solución esta siendo tan difícil como la búsqueda del santo grial; mientras compañías como Amazon crecen a 2 dígitos o contabilizan el total de envíos ecommerce en el 50%, el sector de transporte trabaja en varios modelos distintos.
La verdad que no tengo claro cual es la solución, pero si esta claro que la actual no es satisfactorio ni para el comercio electrónico, ni para las empresas de transporte, y mucho menos para los usuarios/compradores finales.
Si has llegado hasta aquí, te pediría un ultimo esfuerzo, ¿Cuál es para ti la mejor solución?